La realidad vista con ojos de mujer es valiosísima, más cuando la mayoría del conocimiento es generado por hombres. Y por supuesto, muy preciado como el libro nos expone a las vicisitudes por la lucha incansable por alcanzar los ideales. Relatos enriquecedores, amenos y entusiastas… Una delicia.
Mónica.
“Imposible. No estaba dispuesto a perder la primera oportunidad que la vida le brindaba para comprender el por qué de su miseria y cómo hacer para romper las cadenas que por generaciones los sujetaban”
Una lectura esclarecedora. Escuchar de labios de la autora las razones que les llevaron a luchar y ofrendar su juventud, incluso la vida por esta causa, me inspira a enseñar la “historia verdadera de Guatemala” a mis hijos. Esa verdad que se nos niega en las aulas, esa amnesia que subjetivamente se nos impone.
Jessica.
“No son los éxitos o los reveses que contienen estos relatos los que cuentan en definitiva, sino la verdad que encierran y nuestra fidelidad de hoy al ideal que los hizo posible ayer.”
Libro con historias valiosas, ojalá fuera parte de las lecturas de todos, más de los guatemaltecos para conocerse.
Qué dicha que Yolanda nos permitió conocer parte de su historia. ¡Gracias!
Lidia.